A pesar de tener Síndrome de Down, Garrett Holeve, de 23 años, ha
encontrado en las Artes Marciales Mixtas una forma de reinventarse a sí
mismo, tanto mental como físicamente. En el gimnasio, él no es Garrett
Holeve, el chico con Síndrome de Down. Es G-Money, un peleador de artes
marciales mixtas con grandes ambiciones.
"Buscaré
un contrato con UFC, agarraré el contrato, lo firmaré y estaré en UFC",
dijo Garrett en una entrevista con el Miami New Times.
Pero
existe un problema. A pesar de permanecer incontables horas entrenando
en el American Top Team Weston, en Florida, a Garrett le resulta difícil
encontrar una pelea justa. Las personas que dirigen Olimpiadas
Especiales han dado pocos indicios de querer permitir este deporte, pues
a decir verdad no son muchos los padres de chicos con necesidades
especiales los que estarían dispuestos a permitir que sus hijos se
dediquen a las AMM. Y aunque él ha peleado un par de peleas de
exhibición contra peleadores bastante capaces, el resto de los
peleadores no desea ser aquél que noqueó a un chico con Síndrome de Down
o, peor, ser noqueado por él.
Todo comenzó una
noche, en 2010, mientras la familia se encontraba viendo la UFC en
televisión. Mitch, el padre de Garrett, preguntó a sus hijos si a alguno
le gustaría convertirse en peleador de AMM. Él mismo fue boxeador,
pero nunca esperó que el segundo de sus tres hijos fuera el que
levantara la mano....